Continúa la crisis que durante todo el año ha golpeado a varios sectores, incluido a los ovino y caprinocultores del Sur de Sonora por la pandemia, lamentó Candelario Alberto Castillo Salas.

El representante del Consejo Sonorense de Caprinocultores explicó que  todos los años tienen un movimiento cíclico que comienza con ventas flojas pero conforme pasan los meses aumentan, pero que este no fue así.

La paralización de los negocios y comercios por la contingencia, manifestó, pegó duro a su mercado, tras dejar de comprar los negocios de birria, barbacoa y otros más, situación de la que no han podido salir.

“Estamos de la patada con todo el relajo que está sucediendo: Ambiental, económico, sanitario, todo nos está pegando, los mercados están detenidos, ni siquiera con precios bajos, detenidos completamente. Si se nos ha caído bastante, en flujo, un 50% de lo que estaba, en generación de dividendos de perdida un 40%”, explicó.

En una temporada normal de septiembre a diciembre tenían muy buenas ventas y cerraban el año muy bien, comentó, con problemas hasta para cumplir la demanda, pero que ahorita no tienen a donde mandar el producto, porque no hay mercado.

Están incursionando en nuevos cortes y leche y buscando ventas locales generando mercado, pero están muy limitados, aseveró.

Los productores se están viendo afectados por la paralización de los negocios y comercios por la contigencia.

En un año normal, de septiembre a diciembre tenían muy buena ventas, y en este momento no hallan a donde mandar el producto al no haber mercado. (MAYRA ECHEVERRÍA. EL IMPARCIAL.)